Nos encanta la moda asequible, pero queremos que aunque paguemos poco, la ropa siga siendo maravillosa, bonita, de tendencia, y con una buena relación calidad-precio. Hay algunos trucos para comprar ropa online barata y sacarle todo el partido, y que parezca más cara de lo que es.
Trucos para lucir moda low cost con estilo
- Combinar prendas más caras con otras más baratas. Las mezclas bien hechas son siempre un acierto. A mí me gusta sobre todo invertir en zapatos y abrigos. Pero el resto de ropa he encontrado verdaderas gangas que me han funcionado muy bien mientras que otras más caras se han estropeado fácilmente (jerséis por los que pagas un ojo de la cara y aún así les salen pelotillas).
- Apostar por prendas asequibles para las tendencias del momento. Los chalecos de punto son una de las modas que más vemos por todas partes. Pero pronto nos cansaremos de ella, así que por solo 18,99 euros podemos encontrar este chaleco rosa en la tienda de Cloe, monísimo y a buen precio.
Otra de las tendencias del momento son las shackets, las sobrecamisas que podemos lucir en el entretiempo. Las puedes encontrar baratas y muy monas, perfectas para lucir mucho esta temporada, y llevar a reciclar cuando nos cansemos de ellas. - Lucir prendas básicas. Los vaqueros, las camisas de rayas, los jerséis de pico, combinados con estilo, siempre lucen estilosos y elegantes. Los puedes combinar con complementos más atrevidos para darles personalidad.
- Elegir tiendas online que no sean las habituales, para hacernos con vestidos vistosos pero que llevemos todas y parezcamos de uniforme. Si eres de las que compraste el vestido de lunares de Zara seguro que te cansaste prontísimo de él. Los estampados de flores, los estampados bohemios son ideales para buscar en nuevos sitios para ser la más original de todas. Pagas exclusividad por muy poco dinero.
- Saber traer las prendas a tu terreno. No se trata de lucir un look al completo tal y como marcan los lookbooks de las tiendas, sino de probar diferentes combinaciones, experimentar delante del espejo, ir cambiando diferentes complementos para que el look final sea un acierto. No importa tanto cuánto te gastas, sino que tu personalidad prevalezca sobre el look.
- Cuidar los detalles. Las botas o botines pueden ser reparados en el zapatero, los botones cambiados o también puede que una prenda no te ha costado mucho, pero aún así llévala bien planchada y bien puesta, para que no parezca barata sino de calidad.
También importa mucho nuestro look beauty: lucir una melena bonita, sana y brillante, llevar un maquillaje impecable, cuidar nuestra piel, son detalles que hacen que parezca que vestimos más caro y que nuestras prendas no son low cost. - Elegir bien la talla de las prendas. De nada sirve gastarse mucho si luego llevamos algo demasiado prieto o demasiado oversize. Si tenemos dudas, probemos entre dos tallas, porque igual nos sorprende el resultado. No nos quedemos en lo que marca la etiqueta, sino que miremos con objetividad delante del espejo. Una prenda que sienta bien nos hace lucir con mucho más estilo.
- Aprender de nuestra silueta, y lucir las tendencias que más nos favorezcan. Puede que se lleven los pantalones slouchy, o los mom jeans, pero a nosotras nos sienten como un tiro. Luciremos con más elegancia si abrazamos las prendas que más partido sacan de nuestro tipo de cuerpo, ya sea delgado, curvilíneo, con más anchura en los hombros o con más anchura en las caderas. Se trata de seguir las tendencias de moda, pero solo las que mejor nos sientan.
- Ser muy cuidadoso con los tonos y colores que eligen. Hay tonos que te favorecen más a tu tipo de piel, y con esos colores siempre lucirás más guapa y con clase. Además los tonos neutros, o la combinación de un solo tono en todo el look siempre luce más high class. La discreción en la moda low cost siempre es un plus. No hace falta que descartemos los estampados, pero mejor que éstos sean discretos y sutiles. Si combinas varios colores en un solo look, que no sean más de dos o tres.
- Presta intención al interior de la prenda. Los forros pueden hacer que una prenda low cost siente mucho mejor. Pero si tu compra no la trae, puedes llevarlo a una costurera para que lo añada. Las faldas y los vestidos se pueden lucir con una combinación por debajo (si, sí, como las de nuestras abuelas), si vemos que no nos termina de sentar bien.
- También importa (y mucho), la lencería que llevamos debajo. Con una braguita alta podemos evitar que una prenda ajustada nos haga mollas, y un buen sujetador hace que los tops queden mucho mejor. En verano además tenemos que seleccionar el sujetador más adecuado al tipo de escote que llevamos (sin tirantes, con escote en uve, con la espalda al descubierto). Hay sujetadores de todos los estilos para que siempre luzcamos el escote perfecto, solo hay que encontrarlos.
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